La medalla cubana en la Liga Mundial de voleibol
El desconcierto sobre la cancha en el partido por el tercer lugar frente a Rusia tal vez sea el último recuerdo de la selección cubana de voleibol que participó en la Liga Mundial; pero esas imágenes no resumen la actuación del equipo más joven e inexperto del torneo, al que nadie, ni siquiera los más optimistas, le otorgaba posibilidades de incluirse entre los cuatro grandes.
Dos meses atrás, antes del inicio de la vigésima edición de la Liga, el experimentado director técnico Orlando Samuell declaró que el objetivo era clasificar a la final, al menos como el mejor segundo lugar, en un grupo complicado, donde Rusia y Bulgaria parecían los grandes favoritos.
Muchos consideraron que esa meta era muy difícil de cumplir y sobraban las razones para sustentar las dudas. Además de la calidad d...