Adiós a los espejismos en el Clásico Mundial
Cuando les comenté a algunos amigos que el aplastante triunfo de Cuba sobre México en el último partido del grupo B del Clásico Mundial me pareció “engañoso”, muchos criticaron mi “paranoia” hacia la ofensiva cubana y con el excelente desenvolvimiento hasta ese momento de la selección nacional. El juego contra Japón demostró que no somos tan buenos como parecimos en el Foro Sol, ni tampoco tan malos como nos hizo lucir el pitcheo nipón.
Estos son algunos de los errores que, en mi opinión, causaron la derrota:
1) La mala selección del pitcheo
Ya lo había escrito aquí: Aroldis Chapman no era el lanzador para Japón. Tal vez muchos me digan ahora, “bueno, pero si hubiera dominado a los cinco zurdos intercalados que colocó en la dirección el mentor nipón, entonces nadie criticaría a Higinio V...