Sus resultados en los últimos seis años en el Memorial Capablanca no habían sido los mejores; pero no pocos esperaban que, en 2012, en la versión 47 del torneo de ajedrez más prestigioso que se organiza en Latinoamérica, el Gran Maestro tunero Lázaro Bruzón mostrara un rostro diferente.
Las razones para ese optimismo estaban justificadas. Este año el cubano convenció en varios eventos—Tata Steel en Wijk aan Zee, Campeonato de clubes de Cataluña, Iberoamericano—y sus continuos éxitos, sobre rivales en muchas ocasiones inferiores, le permitieron sobrepasar los 2700 puntos de ELO.
Al analizar la progresión de Bruzón— que lo llevó a estar muy cerca de Leinier Domínguez en el ranking en vivo de Cuba—se presagiaba un grupo Elite fortísimo; pero, sorpresivamente, se conoció que el tunero jugaría en el Premier, donde enfrentaría a nueve contrarios, y solo uno llegaba a los 2600. Esto obligaba al tunero a ser casi perfecto, ya que con un simple empate perdería unidades en su coeficiente.
A pesar de este inusual movimiento, la presencia de Bruzón en el Capablanca seguía despertando un amplio interés. Todos querían ver y evaluar los innegables avances del talentoso jugador. Luego, los organizadores anunciaron que el ajedrecista cubano con mejores resultados en 2012 afrontaba complicaciones personales, por lo que había solicitado no asistir al evento. Esa petición finalmente fue aprobada y, por primera vez en un largo tiempo, Bruzón no jugará en el Memorial Capablanca.
Ante la ausencia de Bruzón, los organizadores le dieron su cupo al primer suplente, el Gran Maestro habanero Omar Almeida. De esta manera, el grupo mantuvo a los seis trebejistas cubanos y cuatro extranjeros, dos de ellos procedentes de Rusia (Alexander Rakhmanov y Vasily Papin); además, regresarán el chileno Iván Morovic y el peruano Emilio Córdova.
¿Favoritos? En 2011 Córdova estuvo muy bien y de seguro tratará de mantenerse en el podio, ya que ocupó el tercer puesto en 2009 y el segundo en 2010. Los dos rusos debutan en el Capablanca, y aunque sus coeficientes son altos, ya que Rakhmanov muestra 2600 y Papin 2573; no hay mucha diferencia de ELO—quizás sí en experiencia—con respecto a los jugadores cubanos.
IVANCHUK, ¿OTRA VEZ REY EN LA HABANA?
En la versión anterior, Vassily Ivanchuk estuvo muy cerca de no cumplir con los pronósticos que lo consideraban el amplio favorito del Elite. El vietnamita Le Quang Liem jugó impecable y solo un revés en la ronda del adiós, ante el ucraniano, le impidió al asiático concretar la sorpresa. Doce meses después, “Chuky” retorna a La Habana y su intención es evidente: obtener el sexto título del Memorial Capablanca y consolidarse como el jugador más destacado en la cincuentenaria historia del certamen.
Ivanchuk ganó las ediciones de 2005, 2006, 2007, 2010 y 2011 y solo en dos ocasiones—frente al polaco Kamil Miton y ante Bruzón—inclinó su rey. Su figura siempre llama mucho la atención de los especialistas y fanáticos del ajedrez en Cuba. “Chuky” se mueve constantemente por el salón de juego, no es raro verlo murmurando a solas y con la mirada perdida, probablemente tratando de resolver la posición de la partida en su mente.
Nadie se atrevería a identificar a otro favorito para el Elite. Ivanchuk tiene 2764 puntos, muy por delante de Leinier Domínguez y el ruso Ian Nepomniachtchi, los dos rivales más difíciles que enfrentará en el hotel Habana Riviera, nuevamente sede del evento. A diferencia de trimestres anteriores, “Chuky” ha jugado menos y ni siquiera intervino en la fuerte Liga rusa, donde sí estuvieron Domínguez y Nepomniachtchi, quienes se enfrentaron allí y dividieron el punto en una rápida partida.
Los otros tres integrantes del Elite parecen tener menos posibilidades. El checo Viktor Laznicka tratará de repetir la aceptable actuación que tuvo en 2011 su coterráneo David Navara, quien concluyó en la tercera posición. Asimismo, Vladimir Potkin no lució bien en la Liga rusa, donde cedió unidades en su coeficiente. Por último, el cubano Yuniesky Quesada, el de menor ELO, con 2625 puntos, podría aprovechar esta experiencia para su participación como tercer tablero de la selección nacional, que intervendrá en la Olimpiada de Turquía.