El fútbol americano no tiene muchos seguidores en Cuba; pero eso no significa que sea un deporte desconocido en este país. Desde la época en que éramos estudiantes de preuniversitario, mi amigo Jorge—graduado de Historia del Arte por la Facultad de Artes y Letras de la Universidad de La Habana— y yo seguimos domingo tras domingo las actuaciones de nuestros equipos favoritos de la National Football League (NFL) y en especial a los Miami Dolphins.
Jorge y yo teníamos más esperanzas con los Dolphins en su primer partido de play off desde 2001; pero las cuatro intercepciones lanzadas por Chad Pennington y las pocas yardas logradas ante una de las mejores defensivas de la NFL, la de los Baltimore Ravens, sepultaron las esperanzas de los Dolphins quienes cayeron 27-9.
El resultado fue decepcionante porque ciertamente se podía haber esperado un poco más de actitud de un equipo que terminó por todo lo alto la temporada, con una histórica victoria nada menos que en Meadowland ante los Jets.
Incluso el partido comenzó en favor de los Dolphins por el fumble perdido por los Ravens en su primera posesión; pero ni Ronnie Brown ni los pases de Pennington pudieron mover la bola más allá de la yarda 1 y el gol de campo no pareció suficiente.
A partir de ahí comenzó el desastre. La intercepción convertida en touchdown en los minutos finales de la primera parte selló el resultado final del encuentro; aunque los Dolphins, a pesar de la puntería mostrada por Pennington para lanzar los pases directamente a las manos de los defensores de los Ravens, lograron un touchdown en el cuarto período que hizo soñar a muchos en el Dolphin Stadium y en La Habana; sin embargo, no era el día de los Dolphins y Dan Carpenter, por primera vez en la temporada, falló el punto extra.
Ahí no acabó la historia porque los Dolphins llegaron a estar en la yarda 24 de Baltimore, con suficiente tiempo todavía para intentar la remontada. Tampoco pudo ser. Muchos alabaron al mariscal novato Joe Flacco—el octavo que abre un partido de postemporada—; sin embargo, Flacco no tuvo que esforzarse mucho porque las intercepciones y pérdidas del balón le permitieron a Baltimore comenzar siempre sus series ofensivas en una excelente posición en el campo.
Joey Porter y Crowder quienes habían criticado duramente al ahora coordinador ofensivo de los Ravens, Cam Cameron, el director técnico de los Dolphins en 2007, el hombre del récord horrible de 1-15, poco hicieron contra el excelente plan táctico planteado por Cameron.
Terminó la temporada para los Dolphins y ciertamente ellos fueron una de las grandes novedades. De ser el peor equipo de la NFL el año pasado, ganaron el banderín de la fortísima división Este de la AFC, por encima de los súper favoritos New England Patriots—incluso sin Tom Brady— y de los Jets con una versión deslucida de Brett Favre.
El mariscal de campo Chad Pennington recordó en el último partido contra los Ravens al Pennington de Nueva York, cuando no podía ganar en la postemporada; pero para ser justos, Pennington estuvo bien en toda la campaña: jugó los 16 desafíos y apenas lanzó 13 intercepciones. Lástima que sus 4 malos pases acabaran con el sueño de los Dolphins.
Muy bien por el director novato Tony Sparano. Desde su puesto de ejecutivo, Bill Parcell se lleva los elogios, aunque el hombre que selecciona las jugadas en el campo es Sparano y a él hay que darle el crédito que merece.
Los Dolphins de 2009-2010 deberán ser mejores; pero necesitan obtener a mejores receptores abiertos porque ni Ginn Jr. , Cobbs o Bess me parecen grandes jugadores.
LOS COLTS TAMBIÉN DECEPCIONAN
Después de nueve victorias consecutivas en la temporada, toda la experiencia de Peyton Manning y una ventaja de tres puntos cuando faltaban pocos minutos lucían suficientes para que los Indianapolis Colts derrotaran a los San Diego Chargers en el Qualcomm Stadium; sin embargo, la pésima defensiva y tontas penalidades en el tiempo extra acabaron con los sueños de Manning y el entrenador Tom Dungy de avanzar más en los play offs.
Lamentablemente los Colts vuelven a fallar en el momento oportuno y a pesar de contar con una poderosa ofensiva y un mariscal de campo que considero el mejor de la liga, por encima de Brady—aunque este tenga tres anillos—, Brees, Rivers y compañía, se quedan fuera más temprano de lo que muchos esperábamos.
Los Chargers han renacido y gracias al desplome de los Broncos se convirtieron en el primer equipo en la NFL en clasificar a los play offs después de tener un récord de 4-8. Sencillamente increíble. Contra los Colts aprovecharon su momento de inspiración y sin Tomlinson—lesionado—empataron de forma espectacular el partido y luego ganaron con un touchdown en el tiempo extra.
En la siguiente ronda, los Chargers se las verán contra los Pittsburgh Steelers, mientras los Ravens visitarán a los Tennessee Titans. Esperemos que por el bien del fútbol ofensivo, los Chargers y Titans puedan romper las poderosas barreras defensivas que de seguro impondrán Pittsburgh y Baltimore.
Vea también otro artículo mío: El fútbol americano en Cuba
encontré unas imágenes muy interesantes en la que se dejan ver las porritas del súper bowl con sus trajecitos provocadores si desean verlas solo entre a http://www.playboy.com.mx/
¿decepción?
nah.
el primer error fue enamorarse del equipo.
échale un looking a esto: http://garrix.blogspot.com/2009/01/salvemos-los-dolfans.html
los últimos juegos de la temporada fueron un regalo.
joey porter, cuya últimaa heroicidad fue saquear a un shaun hill sin línea en el último cuarto cuando avanzaba en un drive que no paraban a nadie, se desdibujó.
miami no jugó contra una defensa que valiera la pena en sus últimos juegos, y la agonía para anotar frente a equipos débiles o que venían en picada (como los jets) debería haber encendido las luces de advertencia.
que hubieras querido que ganaran, vale.
pero que tuvieran chance de ganar… ah, ah..