El mundo del ajedrez conoce bien a Magnus Carlsen como el prodigio noruego que dominó el tablero durante más de una década. El campeón del mundo que abdicó su corona, por aburrimiento. Sin embargo, pocos podrían haber anticipado su más reciente movimiento: convertirse en un emprendedor tecnológico de alto perfil.
Del tablero a la sala de juntas
En 2023, Carlsen sorprendió al mundo del ajedrez al renunciar a defender su título mundial. La razón, según explicó, era simple: ya no encontraba motivación en la competencia tradicional. Este giro inesperado marcó el inicio de una nueva etapa en la carrera del Gran Maestro.
Aprovechando su experiencia previa con Play Magnus AS, una empresa que vendió a Chess.com por $80 millones, Carlsen se embarcó en un nuevo proyecto. Fantasy Chess nació como una idea para combinar su pasión por el ajedrez con el atractivo de los deportes de fantasía, un concepto que Carlsen había explorado personalmente durante años.
Una startup respaldada por gigantes
La visión de Carlsen rápidamente atrajo la atención de inversores de alto perfil. En una ronda de financiación inicial, Fantasy Chess logró recaudar $3 millones, con el respaldo de nombres destacados como SNÖ Ventures, Coatue, Breakthrough Initiatives de Yuri Milner y Thiel Capital de Peter Thiel.
Equipo de élite para un juego de élite
Para liderar este ambicioso proyecto, Carlsen reclutó a Mats André Kristiansen como CEO. Con experiencia en la creación de startups exitosas, Kristiansen aporta el conocimiento técnico necesario para complementar la experiencia ajedrecística de Carlsen.
Aunque Fantasy Chess comenzó con la idea de crear un juego de fantasía para torneos de ajedrez, la visión se ha expandido considerablemente.
La startup no solo busca ofrecer juegos interactivos, sino también producir contenido original y mejorar las capacidades de transmisión para los jugadores de élite durante torneos reales. Este enfoque multifacético tiene como objetivo enriquecer la experiencia de los aficionados y atraer a una audiencia más amplia.
Innovación en la interacción
Fantasy Chess está desarrollando formas únicas para que los fanáticos se involucren con el juego. Desde seguir piezas específicas de jugadores favoritos hasta participar en análisis en tiempo real, la plataforma promete una experiencia inmersiva sin precedentes en el mundo del ajedrez.
El timing de Fantasy Chess no podría ser mejor. Con el auge de la popularidad del ajedrez en la cultura pop, impulsado por series como «Gambito de Dama» y streamers populares (y muy polémicos) como Hikaru Nakamura, la startup está posicionada para capitalizar este renovado interés en el juego.
Un enfoque inclusivo
A diferencia de muchos productos de ajedrez que se centran en jugadores avanzados, Fantasy Chess busca atraer a una base de usuarios más amplia. Su objetivo es hacer que el ajedrez sea accesible y emocionante para millones de jugadores ocasionales que desean seguir torneos profesionales de una manera más interactiva.
Aunque Fantasy Chess planea mantener sus juegos gratuitos, la empresa busca generar ingresos principalmente a través de la publicidad. Este modelo presenta desafíos, pero también oportunidades para crear asociaciones innovadoras en el mundo del ajedrez.
Un nuevo capítulo en la carrera de Carlsen
Magnus Carlsen, el emprendedor, está demostrando que su genio va más allá del tablero de ajedrez. Con Fantasy Chess apuesta por transformar la forma en que el mundo interactúa con el juego que lo hizo famoso. Si bien el éxito de esta aventura está aún por verse, una cosa es clara: Carlsen sigue moviendo piezas de manera audaz, tanto en el ajedrez como en los negocios.