El Super Bowl LV será histórico: por primera vez en la NFL un equipo jugará en su propio estadio el partido más importante de la temporada. Este hecho único lo consiguió Bucaneros de Tampa Bay que superó en la final de la Conferencia Nacional a los favoritos, Packers de Green Bay. Mientras, Jefes de Kansas City venció a Bills de Búfalo y garantizó el retorno al Súper Tazón. Ambos ganadores se enfrentarán el próximo 7 de febrero en el estadio «Raymond James», de Tampa, en un duelo entre el mejor mariscal de todos los tiempos, Tom Brady, contra el mejor de su posición en la actualidad, Patrick Mahomes.
Tom Brady y su décimo viaje al Super Bowl
Tom Brady sigue rompiendo récords en la NFL. El veterano mariscal de campo, de 43 años, no tuvo una tarde muy completa, pero una formidable primera parte fue suficiente para que Bucaneros rompiera los pronósticos y dejara en el camino a Packers. La inmensa mayoría consideró que, en el Lambeau Field, Aaron Rodgers y compañía garantizaría su segundo viaje al Super Bowl. Sobre el terreno, la realidad fue otra.
Bucaneros logró una ventaja en la primera parte de 21-10 que resultó decisiva. Espectacular el giro que hizo Leonard Fournette en el segundo TD y formidable el pase de Brady para Scotty Miller, en el TD que cerró esa mitad. Del resto se encargó la excelente defensiva de Tampa Bay.
En la segunda parte, Brady perdió el toque y recibió ¡3 intercepciones!; mientras, Packers se recompuso y montó una remontada que lo colocó 31-23. Entonces llegamos al momento decisivo del partido: con 2,05 por jugar, Packers enfrentó una cuarta oportunidad, a solo seis yardas del TD que (conversión de dos puntos mediante) hubiera empatado el partido. Lo más lógico hubiera sido arriesgar; sin embargo, el coach Matt LaFleur decidió (Rodgers lo dejó muy claro «no fue su decisión») tirar el gol de campo. 31-26, pero con poco tiempo en el reloj. Después vino una clarísima interferencia en el pase (ya los «teóricos de la conspiración» andan diciendo que los jueces ayudaron a Brady) y así terminaron las aspiraciones de Packers.
Aaron Rodgers será nombrado el MVP de la temporada; pero perdió su cuarta final de Conferencia. Mientras, Tom Brady jugará por su séptimo anillo de campeón.
Los Jefes mandan en casa
La final de la Conferencia Americana comenzó muy mal para Jefes de Kansas City, porque Bills anotó nueve puntos consecutivos. A partir de ahí despertó el dúo ofensivo más impresionante de la NFL: el de Travis Kelce y Tyreek Hill.
El ala-cerrada más dominante de la liga capturó 13 pases, para 118 yardas y 2 TD; mientras, el receptor más veloz de la NFL logró 8 recepciones y 172 yardas. Patrick Mahomes jugó con dolor en el dedo gordo del pie izquierdo, así que no corrió mucho (5 acarreos), pero por aire estuvo muy acertado (29 de 38, 325 yardas, 3 TD y solo una captura).
Del lado de Bills, Josh Allen hasta tiró un ovoide, desde el piso, contra la cabeza de un rival, en plena señal de frustración. Su receptor estrella, Stefon Diggs, estuvo apagado casi todo el partido y solo al final logró recepciones para maquillar las estadísticas en el 38-24.
¿Favorito al Super Bowl LV?
Es difícil ir contra Jefes en cualquier selección de favoritos. Este equipo tiene el mejor ataque de la liga. Mahomes tendrá dos semanas para recuperarse antes de enfrentar a una defensa que llevó a Bucaneros al Super Bowl. El hecho de jugar en casa sin dudas es un factor interesante, pero no decisivo, más allá del simbolismo del hecho.
Todo apunta a Jefes; pero creo que, en el último viaje de Tom Brady al Super Bowl, el mejor mariscal de todos los tiempos sacará su experiencia para ganar un nuevo anillo. Bucaneros, por tres.
Le voy a los jefes
Hola Lulu, gracias por comentar. Los Jefes son un equipo con mucho futuro y talento. No nos asombremos si llegan a un tercer Super Bowl de manera consecutiva en 2022. Solo que ante los Bucaneros realmente lucieron mal.
no hay duda bucaneros va hacer historia
Saludos Jesús, ¡hicieron historia!