Uno tras otro, como un castilo de naipes que se desmorona, los más importantes eventos deportivos se han visto obligados a cambiar de fecha, por causa de la expansión de la pandemia del nuevo coronavirus. Todavía no es oficial, pero es muy probable que a la larga lista de posposiciones se sume la V edición del Clásico Mundial de Béisbol, considerado el principal campeonato internacional de esta modalidad.
¿La razón? Todo comienza con la posposición de los Juegos Olímpicos de Tokio, para el verano de 2021. Ante esta inevitable y correcta decisión, el Secretario General de la Liga profesional japonesa de béisbol, Atsushi Ihara, aseguró que Japón no podría asistir al Clásico Mundial, previsto para marzo de 2021.
La liga profesional nipona se verá obligada a comenzar antes de lo habitual su calendario regular, porque, luego, vendrá un parón de tres semanas en el calendario, para que los mejores peloteros de Japón compitan en la cita estival.
A diferencia de Grandes Ligas, para los japoneses el torneo olímpico, en su país, tiene la máxima prioridad. Pero, al mismo tiempo, no es viable económicamente detener, en dos ocasiones, su liga para posibilitar la participación del equipo nacional en el Clásico y los Juegos Olímpicos. Recordemos que la liga japonesa se opuso en 2006 y 2009 a la celebración, en marzo, del Clásico.
Los japoneses propusieron celebrar el V Clásico Mundial en noviembre de 2021, una vez haya concluido la Serie Mundial y la Serie de Japón; pero creo que esta idea no fructificará. Los peloteros de Grandes Ligas difícilmente se comprometan a jugar en un período que consideran de vacaciones, incluso aunque reciban una remuneración económica, a partir de los resultados de cada equipo en el Clásico. Además, las franquicias preferirían que sus jugadores aprovecharan ese tiempo para descansar, después de concluir una temporada que se extiende por más de seis meses.
POSIBLES ESCENARIOS PARA EL CLÁSICO MUNDIAL DE BÉISBOL
Ante todas estas complicaciones, los organizadores enfrentan tres posibles escenarios: mantener el V Clásico Mundial en marzo de 2021, pero sin los japoneses; pasar el torneo para noviembre o posponerlo un año, hasta marzo de 2022.
La primera variante será complicada desde lo económico y deportivo. Japón ganó las dos primeras ediciones y en las otras dos versiones se incluyó entre los cuatro mejores. Además, empresas japonesas patrocinan el torneo y el Tokio Dome ha logrado las mayores concurrencias. Por tanto, un Clásico sin Japón sería deslucido desde todos los puntos de vista.
Celebrar el Clásico Mundial en noviembre ya analizamos que sería cordialmente vetado por los jugadores. Entonces, queda la opción más lógica: postergarlo hasta marzo de 2022. Es cierto que se rompe el ciclo, pero, saben que, eso le ha sucedido a TODOS los grandes eventos deportivos, desde los Juegos Olímpicos, hasta la Eurocopa, Copa América, Mundial de atletismo, natación…y la lista se extiende.
La V edición del Clásico Mundial tendrá varias modificaciones, con relación a las versiones anteriores. El más significativo es la expansión del torneo hasta 20 equipos (4 más que en 2017). Hasta el momento están clasificadas las 16 selecciones que compitieron en 2017 (Cuba entre ellas) y los otros cuatro cupos saldrían de torneos clasificatorios que no pudieron celebrarse por el coronavirus.
Esta versión tendrá cuatro sedes: Taipéi, Japón, Phoenix y Miami. El Marlins Park acogerá los partidos del grupo D, las semifinales y el partido por el título.