Mike Trout es el mejor pelotero del mundo. Tiene solo 26 años y todavía no ha ganado un anillo de Serie Mundial porque ha desarrollado su carrera en un equipo, los Angels, que poco sabe de playoffs en una década. Trout nunca ha sido vinculado con sustancias dopantes, no ha salido con una celebrity, no aparece en los grandes conciertos, no ofrece entrevistas grandilocuentes en los shows nocturnos de la televisión estadounidense y prefiere pasar su tiempo libre haciendo…lo que desea hacer. Para el Comisionado de Grandes Ligas, Rob Manfred, eso significa que Trout no se promociona comercialmente. Si lo hiciera, según el ejecutivo, sería todavía una mayor estrella.
“Usted no puede vender a un jugador de forma pasiva (…) Necesita personas que se unan con aquellos que están tratando de vender con el objetivo de tener un mayor mercado. Estamos muy interesados en lograr que nuestros jugadores desarrollen su marca individual. Pero esto incluye que el pelotero se una activamente”, reconoció Manfred. La polémica no demoró en estallar.
Su equipo, en un comunicado, se mostró orgulloso de la posición adoptada por Trout a lo largo de su carrera. “Combinado con su talento, su sólido carácter crea un rol perfecto para los más jóvenes, en cualquier lugar. Cada año, Mike dedica gran parte de su tiempo y esfuerzo para contribuir con nuestra Organización y hacer mercadeo a favor de MLB. Él continuamente elige participar en la comunidad, visita hospitales, escuelas y otras actividades de caridad (….) Aplaudimos a Mike por priorizar sus valores personales sobre la auto promoción comercial. Eso es muy raro en nuestra sociedad actual y sobresale a la misma altura que su extraordinario talento”, dijo Angels.
Trout prefirió no echar más leña en el fuego. Dijo que todo estaba “cool” con el Comisionado Manfred y pidió pasar la página. “Hago todo lo que puedo. Pero es una larga temporada de béisbol. Tengo que seleccionar cuando quiero hacer cosas y partir de allí”, explicó el jugador sobre su reticencia a participar, en su tiempo libre, en actividades comerciales para, según Manfred, “promocionar la MLB”.
Quizás Trout no sea “el rostro” que quiere MLB. Probablemente tampoco le interese. Con sus batazos y espectaculares atrapadas en el jardín central demuestra, día tras día, sobre un terreno, que es el número uno en el béisbol deporte.