La influencia de los peloteros latinos en la temporada 2016 de Grandes Ligas fue mucho más visible en la caja de bateo que desde el montículo; pero sería injusto no reconocer el trabajo de varios lanzadores que lograron resultados formidables. PanamericanWorld les propone una selección de los cinco más destacados en una campaña marcada por la trágica muerte del lanzador latinoamericano más prometedor de las Mayores: el cubano José Fernández.
JOSÉ FERNÁNDEZ (CUBA – MARLINS DE MIAMI)
Pocos pensaban que, tras la siempre complicada operación de Tommy John, el brazo del cubano José Fernández volviera a ser el mismo. El novato del año de la Liga Nacional en 2013 pasó por momentos de incertidumbre en 2014 y 2015; sin embargo, en 2016 retornó de la mejor forma posible, con una recta superior a las 95 millas y una slider indescifrable, especialmente para los bateadores derechos.
Fernández era la estrella de los Marlins, una franquicia que, con Don Mattingly al frente, buscaba, una vez más, reconstruirse. Desde el comienzo del campeonato, Fernández mostró que su brazo estaba recuperado. Por sus resultados fue seleccionado para el Juego de las Estrellas, celebrado en San Diego y de ese partido siempre se recordará su “batalla” contra David “Papi” Ortiz, en la última vez al bate del carismático dominicano en este tipo de encuentro.
Con récord de 16 juegos ganados y solo 8 perdidos, 253 ponches y un promedio de carreras limpias (PCL) de 2,86, el cubano buscaba terminar de la mejor forma posible el año. Difícilmente obtuviera el premio Cy Young, pero al menos esperaba ser incluido en la votación final; sin embargo, la carrera de este prometedor lanzador quedó truncada abruptamente en la madrugada del domingo 25 de septiembre, cuando la lancha en que iba chocó contra una estructura rompe olas en Miami. Su muerte, a los 24 años, conmovió a todos los seguidores del béisbol en el mundo.
JOHNNY CUETO (REPÚBLICA DOMINICANA – GIGANTES DE SAN FRANCISCO)
Después de conquistar la Serie Mundial 2015, con los Reales de Kansas City, el dominicano Johnny Cueto, como agente libre, buscó el mejor contrato posible y firmó con los Gigantes de San Francisco.
Su inicio en la temporada resultó espectacular, por lo que fue electo para abrir el Juego de Estrellas, por la Liga Nacional. Después de ese desafío, las cosas fueron de mal en peor para los Gigantes. Parecía que el equipo que dirige Bruce Bochy (y que ha ganado tres Series Mundiales en los últimos seis años) quedaría fuera de la postemporada; pero un repunte final, con una espectacular barrida sobre los Dodgers de Los Ángeles, garantizó el avance de los Gigantes a los playoff.
Cueto, de 30 años, fue, por mucho, el mejor lanzador del staff de los Gigantes. Abrió 32 partidos, ganó 18 y solo perdió 5, ponchó a 198 bateadores y finalizó con un PCL de 2,79.
AROLDIS CHAPMAN (CUBA – CACHORROS DE CHICAGO)
Después de jugar seis años con los Rojos de Cincinnati, donde se consolidó como el cerrador más espectacular en Grandes Ligas, con una recta de más de 100 millas por horas, el cubano (ya con nacionalidad estadounidense) Aroldis Chapman firmó un contrato de un año con los Yankees de Nueva York. Los Mulos de Manhattan lograron conformar al trío de relevistas más completo en las Mayores, con Chapman, Andrew Miller y Dellin Betances; sin embargo, el equipo atravesó por diversos problemas, desde ofensivos hasta con el cuerpo de abridores y, ante esto, la directiva decidió vender tanto a Chapman como a Miller.
Los Cachorros de Chicago, sin dudas el mejor equipo en Grandes Ligas, con una marca de 103 juegos ganados, adquirió a Chapman y el cubano realmente cumplió las altísimas expectativas que tenían con él la directiva y los fanáticos.
Con los Yankees, Chapman salvó 20 partidos, tuvo un PCL de 2,01 y propinó 44 ponches en 31,1 entradas de actuación; pero sus resultados fueron mejores con los Cachorros, porque salvó 16 encuentros, en 26,2 innings de labor apenas permitió 12 hits, no le dieron jonrón, ponchó a 46 bateadores, concedió apenas 10 bases por bolas y su PCL fue de solo 1,01.
Los Cachorros son los grandes favoritos para ganar la Serie Mundial y, en ese empeño, el trabajo de Chapman, con sus “misiles” de más de 100 millas por hora, será fundamental.
BARTOLO COLÓN (REPÚBLICA DOMINICANA – METS DE NUEVA YORK)
Cuando un jugador de Grandes Ligas se aproxima a los 40 años, sabe que su vida útil en el béisbol está cerca de terminar. Pero cada regla tiene su excepción y en temas de longevidad deportiva el dominicano Bartolo Colón, a sus 43 años, tiene mucho que enseñar.
Los campeones de la Liga Nacional, en 2015, los Mets de Nueva York pasaron por momentos tormentosos en la actual temporada y no pocos pensaban que quedarían fuera de los playoff. Las lesiones de David Wright, Matt Harvey, Jacob deGrom y Steve Matz indudablemente golpearon muy fuerte al equipo que dirige Terry Collins; pero, en medio de tantos problemas, Colón se convirtió, detrás de Noah Syndegaard, en la figura más confiable del staff de pitcheo.
El dominicano finalizó con marca de 15 juegos ganados y 8 perdidos, abrió 33 partidos, trabajó 191,2 innings, ponchó a 128 bateadores y tuvo un PCL de 3,43. Estos son números espectaculares para un lanzador con un brazo de hierro.