Los Grandes Maestros cubanos Leinier Domínguez y Lázaro Bruzón avanzaron a la segunda ronda de la Copa Mundial de ajedrez que se celebra en Bakú al vencer, en las partidas rápidas, al argentino Federico Pérez Ponsa y al indio Santosh Gujrathi Vidit respectivamente; mientras, el otro cubano que mantenía aspiraciones, Yuniesky Quesada cedió en sus dos duelos ante el ruso Ernesto Inarkiev.
Domínguez tuvo un match extraordinaria y sorpresivamente complicado ante el joven argentino, de 21 años. Perdió la primera partida clásica, luchó durante más de seis horas hasta superar a su rival en un tenso final en la segunda, entabló la primera de las rápidas y solo en la segunda realmente venció sin contratiempos a Ponsa. Su próximo rival será el armenio Hrant Melkumyan quien dejó en el camino al favorito Gata Kamsky.
El match entre Bruzón y el indio Vidit fue caótico. Después de entablar en pocos movimientos la segunda partida clásica, ambos cometieron varios errores en las dos rápidas, aunque el indio llevó la peor parte. La primera parecía igualada; sin embargo, en el movimiento 38, Vidit, en serios apuros de tiempo, hizo Cf4 y Bruzón propinó un fulminante jaque mate con Cg4. Minutos más tarde, el indio logró una mejor posición, pero equivocó el cálculo al colocar su rey en e5 y en dos jugadas llegó otro jaque mate. En la siguiente fase, el cubano tendrá como oponente a Vladimir Kramnik quien, lógicamente, sale como gran favorito.
Por último, Quesada se vio superado en los dos cotejos por Inarkiev. En la primera, el cubano quedó con pieza de menos y el fortísimo peón pasado del ruso por la columna “b” fue más que suficiente. Luego, obligado a forzar, no pudo controlar el avance de los peones por el flanco rey, que se combinaron con la pareja de alfiles para terminar el match.
En la primera fase hubo una gran sorpresa: el chileno Cristobal Henriquez Villagra superó al experimentado israelí Boris Gelfand.
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