La tan publicitada “pelea del siglo”, como sabemos, se pareció más a una farsa, en la que uno de los boxeadores (Manny Pacquiao) compitió lesionado; pero, de cualquier forma, tras esos 12 asaltos en Las Vegas, quizás lo único que haya quedado claro es que tanto Pac-Man como Floyd Mayweather Jr. aumentaron sus fortunas en cifras desquiciantes.
Veamos:
- La pelea generó 4,4 millones de ventas en pago-por-ver. Si tenemos en cuenta que cada venta estuvo valorada entre 90 y 100 dólares, pues “entendemos” los 400 millones que anunciaron Showtime y HBO en ingresos por esta modalidad.
- De acuerdo con estas dos televisoras, que tienen los derechos para transmitir los combates de Pacquiao (HBO) y Mayweather (Showtime), los ingresos totales por concepto de TV fueron de…500 millones.
- Otros ingresos: venta de entradas (72 millones), ventas de derecho de retransmisión internacional (35 millones); circuitos cerrados en bares (13 millones), patrocinio (12 millones) y merchandise (1 millón)
Un rápido cálculo matemático nos indica que esta farsa sí hizo historia, pero no por el resultado deportivo, sino por lo que representó para los dos boxeadores, sus promotores y las televisoras: ingresos entre 550 y 595 millones de dólares. De este total, el 60% fue para la ya muy abultada cuenta de Mayweather Jr. y 40% para el (ya operado) Pacquiao.
¿Habrá una revancha? La “telenovela” de encuentros y desencuentros comenzó muy pronto; pero, ciertamente, aburre. “La daré”…”no la daré”…y en ese debate, probablemente, mantengan entretenido a los medios de comunicación y (ojalá no) a los fanáticos del boxeo. Creo que habrá un rematch, pues aunque la bolsa del próximo duelo entre Mayweather y Pacquiao ni siquiera se acerque a esta, será lo suficientemente “generosa” para poner sobre el nuevamente cuadrilátero a estos dos peleadores.