La noticia realmente me sorprendió, pero con Florentino Pérez como presidente del club, cualquier cosa pudiera suceder. Resulta que, de acuerdo con la agencia italiana ANSA, el Real Madrid negocia con Bill Gates un posible acuerdo que incluiría el cambio del nombre del estadio “Santiago Bernabéu” por el de “Microsoft”. Antes se había analizado la posibilidad de colocarle “Emirates”, por ser este el patrocinador principal del equipo.
El acuerdo le permitiría al club merengue ahorrarse los 400 millones de euros que costará la reconstrucción del estadio de fútbol más célebre del mundo. Los rumores sobre las conversaciones se produjeron a partir de la compra de Gates—el hombre más rico de Estados Unidos—por 113,5 millones de euros del 6% del grupo español Fomento de Construcciones y Contratas (FCC).
Dos semanas atrás, Pérez había insinuado que a lo mejor “el Santiago Bernabéu tendría algún apellido”; pero, de seguro, nadie imaginó que el mítico recinto en el paseo de La Castellana adoptaría el nombre de Microsoft. ¿Se concretará la modificación? Supongo que a los fanáticos merengues no les parezca muy atractivo ese cambio.