El Gran Maestro Lázaro Bruzón no lució bien en ninguna de las cuatro partidas rápidas ante el azerí Teimour Radjabov (2733) y quedó eliminado de la Copa Mundial de ajedrez que se celebra en Tromso, Noruega. De esta manera, como se esperaba, solo Leinier Domínguez logró incluirse en el grupo de 32.
Los resultados de Bruzón en las partidas rápidas habían sido buenos, al menos en las últimas dos Copas Mundiales; sin embargo, contra Radjabov nunca tuvo ni la más mínima posibilidad. En el primer cotejo, a 25 minutos, el cubano condujo las blancas y su rival planteó la Defensa Siciliana, variante Rossolimo. Todo parecía indicar que el azerí alcanzaría la victoria, porque las dos torres negras, ubicadas en la octava fila, paralizaban cualquier intento de Bruzón por explotar la fuerza de su pareja de caballos.
Ambos entraron en serios apuros de tiempo y Radjabov equivocó el plan ganador, pues trató de obtener, a toda costa, el peón en la casilla g4 y esto le permitió a Bruzón intercambiar las torres y llegar a un final inferior—con desventaja de un peón—; pero que, si se jugaba bien, podía igualarse. El tunero supo defenderse y el duelo terminó en tablas, en 70 jugadas.
Luego, en la segunda partida a 25 minutos, apenas hubo lucha, quizás porque trataban de recuperar fuerzas después del enorme esfuerzo en el cotejo inicial. El empate en apenas 13 movimientos de una defensa India de Dama extendió el match a la siguiente fase: dos duelos, con 10 minutos en el reloj.
En el primero de ellos quedó decidido el match. Con negras, el azerí aprovechó la excelente posición de su caballo, la presión de su alfil y la ventaja de los peones por las columnas “c” y “d” para superar todos los esfuerzos defensivos de Bruzón. Tras unos breves minutos de descanso, regresaron al tablero y Radjabov cambió rápidamente la mayor cantidad de piezas posibles, hasta arribar a un final donde tenía ventaja posicional, ante la cual el cubano optó por rendir su rey y felicitar a su oponente.
La eliminación de Isán Ortiz y Bruzón dejó a Leinier Domínguez como el único cubano en el grupo de 32. En la tercera ronda, el mejor ajedrecista de Latinoamérica enfrentará al francés Maxime Vachier-Lagrave (2719) quien dejó en el camino a Ortiz. De acuerdo con el sitio especializado Chess Games [http://www.chessgames.com/perl/chess.pl?pid=56798&pid2=49080], estos dos ajedrecistas se han enfrentado en tres ocasiones: en los Juegos de la Mente, en 2011, Vachier-Lagrave venció a Leinier a la ciega y en una partida rápida; mientras, en la Olimpiada de Estambul, en 2012, el cotejo terminó en tablas, tras 41 movimientos de una Apertura Inglesa.
LOS FAVORITOS AVANZARON
Dos de los principales favoritos al título en Tromso, el armenio Levon Aronian y el ruso Vladimir Kramnik, tuvieron que recurrir a los playoff para decidir sus matches ante Igor Lysyj y Mihail Kobalia, respectivamente.
Aronian, el jugador de mayor ELO, con 2813 puntos, derrotó en las dos partidas rápidas a su oponente; mientras, Kramnik igualó la primera y aseguró su permanencia en el torneo con un triunfo en el segundo cotejo.
Otros jugadores de la elite que avanzaron en esta fase fueron: Sergey Karjakin, Gata Kamsky, Shakhriyar Mamedyarov y Peter Svidler. La gran sorpresa en los playoff fue el revés del ucraniano Ruslan Ponomariov ante el talentoso ruso Daniil Dubov, en un duelo que se extendió hasta la última partida, el “Armagedón”.
Además, Alexander Moiseenko eliminó a Etienne Bacrot, Le Quang Liem superó a Francisco Vallejo, Vladimir Malakhov venció a Laurent Fressinet, Antón Korobov fue mejor que Baadur Jobava y, en el resultado más esperado por los organizadores, el noruego Jon Ludvig Hammer derrotó a David Navara y se convirtió en el único jugador del país sede que entró en el grupo de 32.
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Publicado en Cubahora