Comienza la 52 edición de la Serie Nacional de béisbol, el evento deportivo más importante de Cuba. Cinco meses atrás, Ciego de Ávila obtuvo su primer título en la historia, al derrotar en cinco partidos a Industriales. En este lapso, los fanáticos y especialistas pidieron (no a gritos, pero casi) cambios profundos en la estructura y concepción del torneo. La Comisión nacional realizó una gira por todo el país, para “escuchar criterios” y, claro, tomó de esas ideas las “más convenientes”.
¿Polémicas? Muchísimas, desde la eliminación de Metropolitanos, pasando por el calendario, hasta la selección obligatoria de cinco refuerzos. No obstante, quizás lo más preocupante, al menos para mí, sea que con estas modificaciones no parece que el nivel del béisbol cubano vaya a crecer. ¿Dónde están las estrategias para evitar los nuevos cambios en las nóminas de los equipos? ¿De qué manera se puede “entretener” a la afición de las ocho novenas que no avanzarán a la segunda fase? ¿Cómo estimular más a los peloteros? ¿Qué pasos se seguirán para mejorar el espectáculo? Creo que son muchas preguntas y, realmente, no encuentro respuestas.
¿Qué cambiará para la nueva temporada? Mucho…y poco. Este es un breve resumen de algunas de las modificaciones:
– La desaparición de Metropolitanos dejó en 16 el total de equipos.
– Terminaron las campañas de 90 desafíos y las dos zonas. Ahora será un sistema de todos-contra- todos, a una sola vuelta, de 45 desafíos. Los ocho primeros lugares avanzarán a una “fase superior”, también round robin, donde se enfrentarán en seis ocasiones a los contrarios, para totalizar 87 partidos (45 + 42). ¿Los ocho eliminados? Bien, gracias, a “descansar”.
– Cada uno de los ocho clasificados tendrá la obligación de seleccionar a 5 refuerzos…y darle baja a cinco de sus jugadores.
– Después de los 87 partidos, los cuatro primeros en la tabla de posiciones avanzarán a los playoffs (1 vs. 4; 2 vs 3, al mejor de siete desafíos).
– La “regla IBAF”, esa supuesta “salvadora de los juegos prolongados”, aunque las Grandes Ligas no se hayan interesado en ella, cambiará en esta Serie Nacional. Ahora el tie break se empleará a partir de inning 13, y no del décimo. Además, no habrá alteración del orden ofensivo, pues en lugar de permitir el inicio del turno ofensivo de acuerdo con los deseos de los directores, la entrada comenzará con el jugador en turno y los dos últimos outs ocuparán las primera y segunda bases.
– Los cambios se verán también en el trabajo de los lanzadores. Si un pitcher realiza entre uno y 30 lanzamientos, podrá trabajar al siguiente día. Si hace entre 31 y 50 envíos, podrá volver al montículo en la segunda fecha; mientras que si completa entre 51 y 70 pitcheos, podrá volver al tercer día. La lista continúa: entre 71 y 85 lanzamientos, el pitcher solo reaparecerá en la cuarta jornada después de su salida. Por último, si un lanzador hace entre 86 y 100 pitcheos (número máximo) retornará al quinto día.
– La idea es “agilizar los juegos” (se mantienen los partidos en horario vespertino y solo uno en la noche, por lo que las “plegarias” de los fanáticos no fueron escuchadas por la ¿Unión eléctrica?), así que los directores y árbitros no discutirán las reglas del terreno en público. Solo antes de que comiencen los partidos se intercambiarán las alineaciones de los dos equipos.
– El Juego de las Estrellas no tiene fecha fija. Estaba previsto, inicialmente, para el 3 de febrero de 2013; pero por esta fecha el equipo nacional (no preselección, porque ya estarían los “elegidos” que intervendrán en el III Clásico Mundial) estaría inmerso en la preparación para el evento.
– Jorge Fuentes fue nombrado como Jefe técnico de la Comisión nacional.
– Luis Daniel del Risco y Luis César Valdés trabajarán como jefe de regla y arbitraje en la Federación Cubana y jefe de Regla y Arbitraje en la Serie Nacional, respectivamente.
Vea además:
Al olmo no se le piden peras (un comentario interesante y muy crítico sobre la Serie Nacional)