Después de 10 derrotas consecutivas en partidos por el título, finalmente Villa Clara exorcizó al primero de sus demonios (todavía le falta ganar el campeonato) y salió delante en el play off final de la 49 Serie Nacional de béisbol.
Realmente fue un partido tenso, con muchas jugadas polémicas. En primer lugar llamó la atención que la dirección de Industriales designara como abridor al zurdo Arleys Sánchez, en lugar de su principal lanzador, Odrisamer Despaigne. La estrategia no fue buena, pues aunque Arleys dejó en solo dos carreras a los villaclareños durante casi siete entradas, ahora Despaigne solo podrá lanzar como máximo en 2 partidos del play off.
Como dato curioso: las tres carreras de Villa Clara fueron impulsadas por bateadores zurdos y dos de ellas ante Arleys: Andy Zamora en el segundo capítulo, Yuniet Flores en el tercero y la decisiva, ya frente al relevista Armando Rivero, otra vez Zamora, en el séptimo episodio.
Entonces, ¿funcionó la teoría de zurdo vs. zurdo? No me parece e imagino que los fanáticos industrialistas no estén muy contentos con el trabajo del director Germán Mesa en el juego. Además, en el noveno inning, con el empate en primera base y solo un out, el alto mando azul mandó al corredor al robo. Ariel Pestano, un receptor de una enorme experiencia, se dio cuenta de cuál sería la jugada, pidió «bola franca» y el out sobre el corredor fue muy fácil en la segunda base.
Muy bien por Villa Clara. Lucieron como un gran equipo; pero me desconcertó la poca efectividad ante los lanzamientos en sinker que una y otra vez tiraba Arleys Sánchez; además, el primer bate, Leonys Martín, tuvo una de sus peores noches: cuatro ponches. Quizás demasiado desesperado por chocar con la pelota.
Las palmas para el pitcheo de relevo villaclareño. El doctor Eduardo Martín Saura sabe cómo mover a sus hombres y el trabajo del zurdo novato de 19 años, Yasmani Hernández, fue espectacular durante dos innings y para cerrar, ninguno mejor que Yolexis Ulacia quien solo tuvo que hacer un lanzamiento para terminar con el «maleficio» de los azules sobre Villa Clara, pues desde 1996 los naranjas no le ganaban a Industriales un partido de play off.