Pequeña crónica para una final esperada: Cuba vs. Estados Unidos

Estados Unidos y Cuba, los dos mejores equipos de la Copa Mundial Europa 2009 discutirán la gran final, al igual que sucedió dos años antes en Taipie de China. En el torneo internacional más largo de las últimas décadas, las selecciones más completas afrontarán el decisivo encuentro en condiciones diferentes.

Los estadounidenses, luego de caer inesperadamente en su primera presentación contra Venezuela, lograron 13 victorias consecutivas, con un brillante trabajo de sus pitchers y una ofensiva de largo alcance impresionante. Derrotaron a Cuba en la tercera fase y no pocos consideran a la selección norteña como la favorita.

Mientras el cuerpo de lanzadores cubanos continúa impresionando, a pesar de los errores de la dirección en el movimiento de los relevistas, los bateadores parecen dormidos. Y nadie puede decir que han enfrentado “a un pitcheo” de primera línea. En realidad, si analizamos las nóminas, podemos concluir que únicamente Holanda presentó a un equipo donde se incluyeron la mayoría de sus mejores jugadores.
Los actuales campeones, Estados Unidos, dirigidos por Eddy Rodríguez, llevaron a una selección de buenos peloteros de Triple A, pero no sus principales talentos, y esto es algo que debieran reconocer algunos medios cubanos que no se cansan de repetir que “estos son excelentes jugadores”. En realidad, han lucido bien, tienen ganas de impresionar a los scouts, pero de ahí a considerarlos “los mejores”… ¡por favor!

Cuba ha perdido dos juegos y no es casualidad que en ambos el abridor—Maikel Folch—no haya pasado del sexto episodio; pero para el último partido de la Copa, el director Esteban Lombillo tiene listo a su mejor hombre, el veterano Norge Luis Vera quien ha estado imbateable en el torneo y acumula tres triunfos.

Además, Vera es un abridor acostumbrado a la presión y recordemos en la Olimpiada de Beijing, en el juego semifinal ante Estados Unidos o en el segundo Clásico Mundial, frente a México. A la espera, en el área de calentamiento, Pedro Luis Lazo, el hombre con mayor cantidad de éxitos en la pelota cubana.

Sin embargo, aunque el equipo confía en sus dos mejores lanzadores, la gran interrogante vuelve a ser el bateo o mejor, la falta de él. Quizás nunca antes en la historia, ni siquiera cuando el Clásico 2009, una selección nacional cubana ha tenido un rendimiento tan bajo en la ofensiva. Los números tal vez no parezcan muy malo, pero si quitáramos de las estadísticas los partidos contra rivales inferiores como Sudáfrica, Gran Bretaña y España (a pesar de la resistencia en los dos partidos), pues el average colectivo descendería notablemente.

Los cubanos han perdido dos desafíos, uno de ellos frente a sus rivales de la final, y en ambos se han combinado el fallo del abridor, la ineficiencia ofensiva y un discutible movimiento de los emergentes por parte de la dirección.

Quizás la inexperiencia internacional pesa sobre Lombillo, pero este es un hombre que lleva más de seis años consecutivos al frente de La Habana, el actual campeón de la Serie Nacional; también el director cuenta con el asesoramiento de varios de los mejores entrenadores como Eduardo Martín Saura y Javier Gálvez, entonces, la responsabilidad por los errores es colectiva (todavía no me explico el cambio de José Dariel Abreu por Ariel Pestano en el desafío ante los norteamericanos o la salida del montículo de Yadier Pedroso por Vladimir García quien no ha podido pasar a nadie con su recta).

El partido por la discusión del título entre el campeón y el subcampeón de 2007 promete ser muy tenso y probablemente no abunden las carreras, ya que ambos mánagers enviarán al montículo a sus principales lanzadores, así que Lombillo debería optar por una alineación muy rápida. Una carrera pudiera ser decisiva.

Vea además:
Especial del periódico Granma con fotos y estadísticas de Cuba
Sitio oficial de la Copa Europa 2009