Como muchos esperábamos, el derecho pinareño Yuniesky Maya será el lanzador abridor de Cuba en su duelo contra México por el primer lugar del grupo B. ¿ Qué decide este partido? Absolutamente nada y quizás el director Higinio Vélez debiera asumirlo como tal y probar con Yosvany Peraza en la receptoría y Joan Carlos Pedroso en la primera base. Si rindieran, entonces, ¿por qué no abrir con ellos en la segunda ronda?
Los mexicanos, en una decisión sin dudas sorprendente, anunciaron que llevarán al montículo, una vez más, al zurdo Oliver Pérez quien fue duramente castigado en su debut ante Australia. La sorpresa viene porque esto le impediría a Pérez abrir el muy importante juego inicial de la segunda fase en San Diego.
Tengo que reconocer que me alegró el triunfo de México sobre Australia, tal vez porque le tomé «mala voluntad» al mentor John Deeble con sus ridículas declaraciones al final del desafío que perdieron con Cuba por 5 a 4.
Este hombre llegó a decir que el supuesto cambio de alineación de Cuba (es decir, Malleta bajó del quinto a sexto turno) era una «falta de respeto» de los cubanos, y agregó que Cuba se caracterizaba por estas movidas.
Su «argumento» para justificar el revés es lamentable. No expresó nada del jonrón de Peraza ni de las 100 millas de Chapman, se limitó a criticar a Cuba y fin de la historia. Bien, la historia terminó para él y los australianos de la peor manera: fuera de combate por 16 a 1. Buen retorno a casa.
Como ya comente en el mismo sitio del Clasico, las palabras del mentor australiano son una infeliz conclusion para los tremendos primeros dos juegos de su equipo. Que lástima que sea por eso que tantos nos alegremos de la paliza que le dio Mexico.