El receso de la XLVIII Serie Nacional llega en un momento oportuno para muchos equipos y jugadores; aunque seguramente otros desearían que prosiguiera la temporada; pero la próxima participación de la selección cubana en el II Clásico Mundial obliga a la detención del calendario y reafirma a esta campaña como una de las más atípicas de los últimos tiempos.
Varios aspectos resultan muy llamativos en la Serie: la profunda diferencia entre las dos Ligas, el bajo nivel mostrado por selecciones como Sancti Spíritus, Industriales y Las Tunas; el avance en Metropolitanos y Matanzas; la cerrada carrera por el liderato de cuadrangulares entre cinco peloteros y el paso dominante de Villa Clara y Ciego de Ávila en el Oriente.
De seguro nadie pudo imaginar antes del inicio de la Serie— a finales de noviembre del año pasado— que dos meses después, Industriales y Sancti Spíritus ocuparían la sexta y séptima posición de la Liga Occidental. ¿Cómo entender el notable descenso? Los espirituanos presentan una nómina similar a la de la temporada anterior; sin embargo, ahora son penúltimos en bateo colectivo, mientras Industriales es último.
Los capitalinos históricamente han contado con un excelente cuerpo de lanzadores; pero este año los números son alarmantes: décimo segundos de la Serie. Metropolitanos, el llamado equipo-escuela, muestra actualmente un pitcheo muy superior al de Industriales. ¿Qué ha pasado? La respuesta pudiera encontrarse en una deficiente preparación previa, tanto en Sancti Spíritus como en Industriales. El director debutante Germán Mesa introdujo en su cuerpo de entrenadores a varios hombres que fueron estrellas como peloteros; aunque con escasa experiencia en su nueva función y quizás este factor afecte el rendimiento de los atletas.
Las lesiones y ausencias también han ocasionado problemas al equipo de la capital. El brazo de Frank Montieth es una incógnita, Deinys Suárez sigue muy lejos de su mejor forma y los relevistas han desperdiciado, en múltiples ocasiones, ventajas en las entradas conclusivas. El receso por 45 días llega en un momento ideal para Industriales y Sancti Spíritus. Ambos necesitan el descanso para reagruparse.
Al calendario le quedan apenas 33 desafíos y la separación de capitalinos y espirituanos no es tan grande con respecto a Metropolitanos, el equipo que ocupa la cuarta plaza, por lo que es posible una remontada; pero Mesa, conocido en sus años de jugador como “el Mago”, necesitará más de un truco para llevar a su selección a los play offs. Juan Castro, manager de Sancti Spíritus, intentará motivar más a sus peloteros. Pocos discuten la calidad presente en las nóminas y nadie se atrevería a decir que no son la gran decepción de la Serie.
En el Oriente, las cosas tampoco han marchado bien para Ermidelio Urrutia en Las Tunas. Bajo su guía, los tuneros estuvieron en los play offs en las últimas dos temporadas; aunque esa cadena podría quedar rota en esta Serie, ya que el equipo aparece separado por once juegos de Holguín quien marcha en la cuarta posición.
Individualmente, la mayor sorpresa la ha protagonizado el jardinero santiaguero Alexei Bell. En 2008 tuvo el rendimiento más espectacular en la historia de las Series, con sus 31 cuadrangulares y 111 carreras impulsadas en la clasificatoria. Además, sus jonrones en la Olimpiada de Beijing presagiaban que Bell sería regular de la selección nacional por un largo tiempo.
Un pelotazo en su primera vez al bate en la Serie afectó al santiaguero—golpeado en el rostro por un lanzamiento de más de noventa millas tres años atrás—y este desafortunado hecho lo descontroló. Bell ha estado muy lejos de la forma física mostrada en la pasada campaña y los psicólogos tendrán que trabajar muy fuerte con él durante el receso. Su fuerza no ha desaparecido, solo parece dormida.
La Serie también es atípica porque pocas veces se había visto una porfía tan cerrada entre tantos jugadores por el liderato de cuadrangulares. Tres receptores, una jugador de cuadro y dos jardineros discuten el título y, hasta el momento, el granmense Alfredo Despaigne está frente con 16, uno por delante de Yosvani Peraza, Joan Carlos Pedroso, Yoenis Céspedes y dos sobre Rolando Meriño. No sería arriesgado decir que este quinteto podría terminar con más de 20 jonrones.
El prolongado descanso representa un gran reto para todos los equipos. La Serie se reanudará el 27 de marzo y los entrenadores tendrán que utilizar toda su imaginación con tal de mantener la mejor condición física en los jugadores. Nada fácil sobre todo porque muchos iniciaron la preparación en septiembre de 2008, ya que supuestamente la Serie tuvo, en algún momento, fecha de comienzo en octubre. No fue así y entonces hubo que introducir nuevas variantes de entrenamiento que probablemente sean retomadas ahora.
La idea de sostener topes internos o con las provincias más cercanas parece adecuada; además, la Liga de Desarrollo continuará su calendario y tal vez algunos talentos incluidos en la nómina de la Serie— y que sean menores de 23 años— pudieran jugar con los equipos de esta segunda división.
Después del Clásico, la Serie entrará en su recta final y varias selecciones afrontarán esa recta en una situación desconocida para ellos: Industriales y Sancti Spíritus necesitan desesperadamente cada victoria; Metropolitanos y Matanzas saben que están cerca de lograr la clasificación; mientras, en el Oriente, Holguín, Camagüey y Granma lucharán muy fuerte por el último boleto a los play offs.
Publicado en Cubasí